hoy me sacaron las mentiras,
todas, cada una.
dedo por dedo.
chascados.
y me cagué de risa.
y se me había olvidado ese sonido,
y me reía un poco de que se me había olvidado eso...
tan básico.
también sabía silbar,
hacer ruedas de carreta,
y tirarme al piso frío del pasillo,
y el terrazo brillante.
o pintaba calles con tiza en el cemento,
y tenía varios carros.
y me dió de risa,
de esa que también se me había olvidado,
de esa de los 5 años,
cuando uno descubre algo insignificantemente genial.
4 comentarios:
las cosa intensas y fugaces...
insignificantes y geniales...
esas que le dan sentido a la vida... :)
normalmente lo más sencillo es lo que nos hace reír más sinceramente:-D
como las burbujas de jabon en el parque de la paz
es genial ver como las cosas sencillas y olvidadas nos pueden hacer reir.. ya sea risa de alegría o risa irónica...
insignificantemente genial el post
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